Colección: PATSHANAI

En la lengua sagrada del pueblo Wayuu, al norte de Venezuela,
Patshanai es el nombre que se le da a la libélula. Cuenta un antiguo relato que Maleiwa, el dios creador, quiso saber si su pueblo tenía suficiente agua en la tierra reseca de La Guajira. Entonces envió a Patshanai para que viera con sus propios ojos. Ella voló alto, tocó la superficie de un charco, creyendo que eso bastaba, regresó a decirle a Maleiwa que todo estaba bien. Pero no era así. Por confiar solo en la superficie, no llegó más agua a ese lugar. Desde entonces, la libélula recuerda su error, y vuela cerca del agua… como quien aprende a mirar más profundo.

Pero Patshanai no es sólo símbolo: es vigía de los ecosistemas. Las libélulas pertenecen al orden Odonata, y tienen una vida dual: acuática en su fase larval, y aérea en su madurez. Sus larvas habitan ríos, lagunas y humedales, donde regulan poblaciones de mosquitos y otros insectos, y sirven como alimento para peces y aves. Son bioindicadoras: cuando ellas están, el agua está sana. Cuando desaparecen, es señal de alerta. Como adultas, siguen equilibrando la cadena alimenticia y polinizando discretamente. 

En el diseño Patshanai se entrelazan las 7 especies de libélulas que hoy se encuentran amenazadas en Venezuela, pequeñas guardianas de los ecosistemas. En BAIRÜ, honramos a Patshanai como símbolo de belleza y vigilancia. De transformación. Y de esa sabiduría antigua que habita en lo pequeño, y protege lo esencial.

 

PATSHANAI